Durante el año 2004, el Sindicato Médico negoció con ELA y SATSE una plataforma unitaria -la llamada Plataforma de 10 puntos- que recogiese las reivindicaciones de todos los firmantes. El objetivo estratégico que guió esta unión entre distintos, fue lograr un núcleo sindical, lo bastante importante como para obligar a Osakidetza a descender del pedestal en que se encontraba y mostrar actitudes más negociadoras.
Con este esquema estratégico participamos en las huelgas del año 2005, que terminaron con la convocatoria de las Elecciones Autonómicas. Se siguió la defenestración de la cúpula de Osakidetza y su sustitución por los actuales dirigentes.
Cuando se ha pretendido renovar la alianza en el 2006, nos encontramos con que ELA ha modificado unilateralmente la Plataforma 10 puntos previamente pactada. Pronto se evidencia que el objeto de este cambio ha sido dar entrada en la alianza a un nuevo sindicato, ESK, y que ello no se explica por motivaciones sindicales ligadas a la Sanidad, sino por condicionamientos que, probablemente, tienen más que ver con la política sindical y con la política a secas. Ha quedado claro que ELA ha preferido la compañía de ESK-CUIS a la del Sindicato Médico.
El Sindicato Médico hubiera estado dispuesto a muchos esfuerzos de adaptación si con ello se lograba la unidad sindical de toda la mesa sectorial frente a Osakidetza, lo cual, evidentemente, no ha ocurrido. Lo que nunca vamos a hacer es apoyar ciegamente las acciones convocadas por quienes han abandonado el acuerdo previo.
El Sindicato Médico dedicará todos sus esfuerzos, ahora en solitario, a defender los intereses y las aspiraciones de los facultativos. Le hemos dicho a Osakidetza que para contar con el Sindicato Médico debe dar muestras inequívocas de que inicia un cambio de rumbo:
– Dando pasos hacia la formación de un marco propio de negociación.
– Revisando la Carrera Profesional.
– Dotando de medios a una Atención Primaria largamente desatendida.
– Modificando el Complemento Específico para que «igual trabajo» se remunere con «igual salario».
– Caminando hacia una regulación de guardias que acabe con las jornadas abusivas.
– Revirtiendo, por fin, una tendencia salarial a la baja que nos ha llevado a perder el 15% del salario en 10 años.
Mantenemos abiertos canales de negociación. Sabemos que todo esto requiere tiempo y recursos; estamos dispuestos a hablar de plazos pero no a que todo se quede igual. Hemos hecho nuestras propuestas a Osakidetza, y actuaremos en consecuencia.
