El Sindicato Médico, junto con SATSE y la Federación de Facultativos de Hospitales (FFHE) promovemos una campaña de protesta contra la actual política laboral de la dirección de Osakidetza.
No nos extenderemos en las razones que justifican la protesta. Son múltiples. Cada Hospital, cada Servicio, cada Centro de Salud, cada categoría profesional… todos tenemos motivos, de enfado, de queme, de desengaño……… Hay sentimientos para todos los gustos. Los tiempos de crisis económica son malos para todos, ya lo sabemos, pero, para empezar, en sólo dos años (2010 y 2011) perderemos, como poco, un 10-12% de nuestro salario real. Mal comienzo, pero aún siendo enorme la brecha salarial que nos han abierto, no es, ni mucho menos, la única razón que nos empuja a la protesta. Siempre hemos tenido vocación negociadora y nunca nos han gustado las posturas extremistas ni la confrontación gratuita, pero, desgraciadamente, tenemos que decir que Osakidetza no ha dado ninguna oportunidad al diálogo. Muchos se han sorprendido del tono que han ido adquiriendo en estos meses nuestros boletines informativos. Alguno, disgustado y molesto, hasta se ha dado de baja en la afiliación. Allá cada cual. Si supiesen las veces que nos hemos reunido en 18 meses con la Dirección de Osakidetza, sólo para sentir que nos estaban tomando el pelo; si conociesen (y padeciesen) los atropellos y la chulería (y no solo con los interinos y eventuales) de ciertos gerentes desaprensivos; si hubiesen experimentado la impotencia que se siente cuando se denuncian estas cosas en Vitoria y a cambio, solo recibes silencio y complicidad con el agresor, entonces quizás dejarían de sorprenderse. El ambiente de miedo que se extiende a causa de la deriva dictatorial de Osakidetza, nos parece razón de tanto o mayor peso.
Por si faltaran razones, no contentos con bajarnos el salario y repartir patentes de corso para maltratar laboralmente a los médicos, el Consejero alardea de “colaborar con los profesionales” y sus servicios de propaganda venden a la opinión pública todo tipo de “ampliaciones” y “mejoras” en la cartera de servicios, que se presentan en el acostumbrado tono oficial triunfalista, y que, como siempre, se harán a nuestra costa. Ya conocemos la fórmula: las medallas para los dirigentes, y el trabajo (y las palmadas en la espalda de los ingenuos) para los sanitarios. ¡Además de apaleados nos tienen por tontos! Después de todo esto, hasta parece un asunto menor que todavía no tengamos un Acuerdo de Trabajo en condiciones.
La campaña ha comenzado con una rueda de prensa de los sindicatos profesionales sanitarios (SME-SATSE-FFHE). Ha tenido bastante acogida en los medios y la reacción del Consejero, desabrida y con ataques personales, indica la escasa solidez de sus argumentos. No merece muchos comentarios; ya los hemos hecho en una Nota de Prensa conjunta y a través de una carta al Consejero, bien trabada y mejor escrita de nuestros colegas de la FFHE.
En esta segunda fase de la protesta, SME, SATSE y FFHE vamos a pedir a todos los sanitarios que se coloquen, de forma visible en el uniforme, una pegatina. Perseguimos un doble objetivo; por una parte, que los directivos sientan, de primera mano, el enfado que existe en Osakidetza y tomen buena nota; por otra, que la población perciba que las aguas sanitarias no bajan tranquilas; no hay que olvidar que entre los usuarios de la sanidad hay gente (periodistas, comentaristas, políticos…) con influencia en la opinión pública.
Estamos intentando, poco a poco, mover una situación congelada, por la crisis económica y por una dirección que se atrinchera tras ella. Va a ser una guerra larga. Poco conseguiremos sin la colaboración de todos y cada uno de los profesionales sanitarios. Necesitamos tu opinión y tus sugerencias, tus críticas y también tu apoyo. Nuestra página web está abierta, aquí encontrarás información continua.
