2018-01-10 07:55:30 smedico
Hace unos días recibíamos una carta escrita por un MAP del CS Leioa denunciando la situación insostenible que han soportado 3 médicos obligados a hacer frente al trabajo de ocho, ausentes por licencias y baja laboral. Un ejemplo más de la «fabulosa» organización de Osakidetza.
«Cuidar la salud del paciente y aliviar su sufrimiento» requiere capacidad de trabajo, esfuerzo y dedicación. Es lo que la sociedad espera del médico en general y del de familia en particular.
Pero, ¿cómo pretende Osakidetza que estos médicos, que prácticamente han triplicado su trabajo en una semana, atiendan como es debido a la población?; ¿cómo aliviar el estrés que supone tener que pasar consulta bajo la presión del reloj y la sala de espera atiborrada?; ¿y la incertidumbre de los errores médicos derivados del cansancio que provoca tal sobrecarga?
Osakidetza reitera una y otra vez la «falta de sustitutos» pero ¿qué hace para solventar este problema? ¿Qué hace para motivar a los médicos y evitar que se vayan a entidades privadas o emigren a otros sistemas de salud? Porque «motivación» dista mucho de «explotación» y es precisamente así como se sienten muchos médicos: explotados y nada motivados.
En los tiempos que corren encontrar un médico satisfecho con sus condiciones laborales es tan difícil como encontrar una aguja en un pajar. Esto es especialmente llamativo en el ámbito de la Atención Primaria y en Urgencias Hospitalarias, y más aún si hablamos de sustitutos.
De momento lo único que se le ocurre a Osakidetza es exprimir a fondo a los médicos disponibles hasta que el desánimo y el agotamiento mental hacen mella en ellos. Aún así somos el colectivo con menos bajas laborales y la empresa lo sabe.
Desde el Sindicato Médico de Euskadi invitamos a Osakidetza a la siguiente reflexión: ¿Es ésta la forma idónea de conseguir que los médicos, que son el pilar central que sustenta el sistema sanitario, se sientan motivados para pertenecer y seguir en la empresa?