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Osakidetza funciona a salto de mata

En relación a la sobresaturación y largas esperas en distintos servicios durante las últimas semanas, llama la atención que Osakidetza centra el problema únicamente en la epidemia estacional y no en su responsabilidad como empresa

Al VRS y gripe habitual ahora se suma el coronavirus. Pero no estamos hablando del Covid 2020 ni de un contexto que fue tan dramático como imprevisible, sino de una epidemia que se repite año tras año y, por tanto, se puede prever.

En el Sindicato Médico de Euskadi consideramos que el Departamento de Salud debería haber hecho campañas de información y concienciación a la población con un martilleo publicitario continuo (vacunación, prevención, utilización de mascarillas, uso responsable de los recursos sanitarios disponibles). Asimismo, debería analizar la demanda y actividad asistencial con el fin de reforzar aquellos centros y/o servicios más sobrecargados.

Lejos de tomarse en serio estas medidas, la Consejería ha declarado que no se cerrarán los PAC o se procederá a la apertura de plantas hospitalarias dentro de un supuesto plan de contención. Esto, en plena campaña pre-electoral, vende mucho…, mucho humo…

PACs abiertos solo con  personal de enfermería, no capacitado para resolver problemas médicos, en realidad es como si estuvieran cerrados. Además, no es de recibo que en algunos centros o servicios funcionen con el 50% de profesionales de la plantilla y con una sensación continua  de “ir a las trincheras” cada vez que van a trabajar.

Si a eso le añadimos comentarios como que “no hay personal médico porque coge vacaciones” cuando nos consta que existen acuerdos internos entre profesionales precisamente para lo contrario (es decir, no coger vacaciones en estas fechas conflictivas)  la indignación del colectivo está garantizada y no hay palmadita en la espalda que valga.

En cualquier empresa que se precie, en previsión de un aumento de la demanda, hay un aumento paralelo de recursos o potenciación de los mismos. Pero Osakidetza es un punto y aparte, funciona “a salto de mata”, y cada vez peor.