Osakidetza: ¿Médicos? No, gracias

2019-11-13 17:45:52  smedico

«Saber que no se sabe, eso es humildad.
Pensar que uno sabe lo que no sabe, eso es enfermedad.” LAO TSÉ 

Hecho real: Una tarde en la consulta decidí poner yo mismo un inyectable intramuscular, pues la enfermera estaba muy liada. Al cabo de un rato ella vio restos de la acción. Me preguntó quién lo había puesto, y tras mi respuesta, la suya fue contundente: “Ese era su trabajo -me dijo- que si ella estaba sobrecargada era su problema, pero que si yo –médico- hacia su trabajo de enfermera, posiblemente no lo haría tan bien como ella, si había alguna complicación la responsabilidad sería mía y que el día de mañana igual no le contrataban porque algún médico estaría por ahí haciendo el trabajo de Enfermería”

Toda una lección, que me hizo recordar al bueno de Lao Tsé.

Desde hace tiempo todos/as coincidimos: Los/as médicos estamos sobrecargados/as. Osakidetza lo sabe, pero en lugar de implementar medidas para hacer atractivo nuestro trabajo, ha descubierto la solución: Dar el trabajo médico a otras categorías. Contento hoy a las/os médicas/os y, además, me sale más barato.

Pero esto no solo ocurre con la Atención Primaria, Emergencias y Urgencias Hospitalarias; comienzan a oírse rumores con otras especialidades. Lo llamativo es que desde sectores de la medicina de Atención Primaria se ven con buenos ojos estas iniciativas, relegando así la categoría de una especialidad que desde el SME creemos que no es menos que las demás.

¿Y cómo se vive esta situación en la Enfermería y en la Medicina?

Dentro de la Enfermería
Hay compañeras que reconocen que no se han formado para este trabajo, por lo que intentan eludir estas responsabilidades que no les competen. Otros están por la labor, aunque sin tener muy clara su responsabilidad.

Dentro del colectivo médico,
y teniendo en cuenta la desesperación de la sobrecarga laboral, también hay quien está dispuesto/a a asumir la responsabilidad legal que de ello se derive y las consecuencias de una negligencia o error «enfermero». Otros/as compañeros/as, a pesar de ser tentador este “pan para hoy”, estamos seguros/as que será “hambre para mañana”. Sin olvidar los enfrentamientos que comienzan a haber en equipos donde el solape de estas nuevas “cargas/descargas” de trabajo no termina de definirse.

Son varias las ocasiones en las que Osakidetza ha querido derivar el trabajo médico hacia la enfermería. Se han hecho varios intentos en el ámbito del triaje, tanto en las urgencias hospitalarias como en ambulatorios, se estructuró en 2015 con los denominados RAC (Recepción Acogida y Clasificación), es un hecho en la coordinación en Emergencias, protocolos del Síndrome Gripal en Urgencias Hospitalarias o globos sonda que empiezan a plantear el inicio y control del tratamiento del Sintrom en algún servicio de Hematología, entrando de lleno ahora con el denominado PLA (Patología Leve Autolimitada).

En un inicio la disculpa era organizar el pico de trabajo en momentos puntuales, luego la falta de médicos. Pero ahora –ya sin complejos- el objetivo es vaciar parte del contenido del trabajo médico para pasarlo a la enfermería; en todos los centros, permanente, obligatorio y aumentando cada vez más la oferta de enfermería a costa de vaciar el contenido del trabajo médico.

Pero ojo; estos protocolos instan al personal médico a cometer una ilegalidad, pues cuando precisan la firma de un médico (informes de alta, bajas laborales, recetas …), se le pasa al facultativo para que –sin ver al paciente- firme los documentos médicos que enfermería ha decido. Hay que saber que esta firma, automáticamente, en caso de complicaciones, traslada la responsabilidad al médico firmante. No debemos olvidar que, según la legalidad vigente, el único profesional formado y autorizado para diagnosticar y tratar es el/la médico/a, y esto es lo que garantiza legalmente la Seguridad del Paciente. Todas las iniciativas que está implementando Osakidetza en este sentido están permitiendo que personal no formado legalmente este diagnosticando y tratando, con el atentado a la citada Seguridad del Paciente que ello puede implicar.

La disculpa de disminuir la sobrecarga médica sale rentable, ya que el trabajo médico sale ahora a precio de enfermería. Negocio redondo. Si Osakidetza quiere hacer frente a la falta de médicos/as, debe contratar más médicos/as o incentivar a quienes están trabajando, y no a atribuir al personal de enfermería funciones al margen de sus competencias, formación y responsabilidad.