Opiniones
Y con el verano llegó el desastre…
El problema de una plantilla muy mal dimensionada ya está creando problemas en la atención al paciente y debilitando los derechos laborales de los profesionales sanitarios
Llega el verano y se acrecientan los problemas tanto en los centros de salud como en los hospitales de la red de Osakidetza, fundamentalmente en aquellos ámbitos que dan una atención inicial al paciente: Atención Primaria, PAC y Urgencias.
Dificultades para cubrir ausencias, cambios y recortes en los horarios de atención, cargas de trabajo imprevistas, demanda a los profesionales para que hagan turnos extra con una remuneración dispar en las distintas OSIs…
Y no hablamos por hablar. Algunos médicos y médicas de Atención Primaria de la OSI Uribe nos han consultado porque les habían informado que, con carácter obligatorio, se tendrían que desplazar a otro centro de salud para hacer refuerzo de PAC durante 3 horas, pero como se suponía que era dentro de su jornada de tarde, sin remuneración extra alguna.
Tras conocer este hecho, el Sindicato Médico habló con la Subdirección de Atención Primaria y solicitó y consiguió la equiparación de las condiciones a las de la OSI Basurto, donde los refuerzos en los PAC son con carácter voluntario y se pagan según la modalidad A. Porque dentro de una misma empresa, como es Osakidetza, no debería haber agravios entre los distintos trabajadores (distintas OSIs, distintos puestos funcionales, etc.).
El garantizar a los profesionales el descanso durante los meses estivales requiere una planificación estructurada y con antelación suficiente porque, si no, esto nos lleva a tener que cubrirnos las vacaciones entre nosotros.
Es evidente que dicha planificación no ha sido la adecuada porque, una vez más, nos encontramos ante un desastre de verano, algo que lleva repitiéndose los últimos años. El problema fundamental es que somos pocos.
Por un lado, no hay facultativos suficientes en las listas de sustitución, algo que se debe, en parte, al maltrato de la Administración para con los profesionales. Por eso, en el Sindicato Médico de Euskadi trabajamos para evitar que se hagan contratos en precario.
Por otro lado, la plantilla de facultativos de Osakidetza está claramente infradotada. Es necesario un análisis pormenorizado de la situación que revele las necesidades reales de nuestro sistema sanitario. En este sentido, tras la información aportada en la última Mesa Sectorial, nos llamó mucho la atención que un tercio de las necesidades estructurales del total de la plantilla de Osakidetza corresponde a la categoría de facultativos. Por eso, exigimos la creación de nuevas plazas para solventar estas carencias.
Una vez más, arrimamos el hombro y lo hacemos por los pacientes y nuestros compañeros. Pero la buena voluntad y la energía no son ilimitadas. Si Osakidetza sigue así, llegará un momento en el que no podamos colaborar y la situación se volverá incontrolable. ¿A qué espera la Administración para poner remedio?