Todo lo que se hace con precipitación cuelga de un hilo…….. y, a veces, se rompe. Osakidetza ha publicado la Carrera Profesional a trancas y barrancas, en un esfuerzo por atenuar la conflictividad sanitaria; por otra parte, se ha metido en el laberinto de una «evaluación-ficción» retroactiva que no sólo es arbitraria e injusta sino que, además, va a resultarles contraproducente; por racanear hoy, van a esterilizar la inversión completa, la Carrera.
Toda esta precariedad, todo este coger con alfileres, se está traduciendo en caos, en un caos creciente. La semana pasada hablábamos de caos organizativo y administrativo; ahora revisaremos el caos legal.
A todos los especialistas vía MIR se les «escamotean» sus años de residencia para computar servicios prestados. Es una posible fuente de ilegalidad e impugnación.
Los «jefes sin mando» resultan, en la práctica, excluidos de la Carrera. Otra injusticia segura y posible ilegalidad.
Los interinos están excluidos cuando la LOPS y la LOSE les reconoce derecho a Carrera.
La designación de algunos miembros de las Comisiones de Evaluación debe hacerse imperativamente por procedimientos de elección democrática. En muchos sitios no se está haciendo así.
Auguramos una cascada de reclamaciones. El propio decreto de Carrera será impugnado por el Sindicato Médico si no se modifica. No nos gusta terminar en los tribunales, pero con Osakidetza no queda otro remedio. No quieren ni han querido negociar.