Osakidetza ha subido la prolongación voluntaria en el servicio activo, pasando de los 67 a los 68 años. Esto significa que Osakidetza permite seguir trabajando hasta esa edad. No significa que estemos obligados a trabajar hasta esa edad.
Esta medida ha sido apoyada por el Sindicato Médico de Euskadi y lo hemos hecho porque nos parece una medida de justicia y de sentido común:
- Porque es un derecho de cada persona elegir si prefiere jubilarse a una edad u otra. Si está trabajando gustosamente o prefiere otra cosa. Hasta hace pocos años el límite estaba en 70 años.
- Porque en estos momentos y de cara al futuro faltan de médicos. Son evidentes las dificultades existentes para garantizar la sustitución del personal de plantilla (vacaciones, bajas…) o para completar los turnos de guardia en los hospitales. La prolongación del servicio activo, en suma, no está ejerciendo un efecto tapón para los médicos de las nuevas generaciones. En otras categorías la situación es bien diferente.
- Porque es una prolongación voluntaria; como igualmente voluntaria es la posibilidad de jubilarse anticipadamente a los 63 años.
El SME y el conjunto de los sindicatos médicos que operamos en el Sistema Nacional de Salud proponemos para el médico una jubilación flexible que se extienda desde los 60 hasta los 70 años. Esto no lo decide Osakidetza en Vitoria, ni siquiera el Gobierno Vasco, no está a su alcance; implica influir políticamente en el Gobierno central; depende directamente de él. No es cosa de hoy para mañana.
