Sustituciones en Atención Primaria

Sobre las sustituciones, sobre su escasez y sus avatares nos llegan todo tipo de informaciones: Nos llegan rumores, nos llegan cuentos y nos llegan, también, noticias plenamente auténticas. Sin embargo, todo el «ruido» que percibimos señala siempre en la misma dirección, a saber: Tres notas dominan el panorama de quejas: escasez siempre, desorganización muchas veces y verdadero caos en casos no tan aislados. Ausencias que no se sustituyen porque al responsable de turno no le da la gana; médicos sustitutos disponibles para el cien por cien de las ausencias, en un centro, y nada de nada para el centro vecino; pacientes vistos en ampliagenda y amplihorario que no se han pagado tras varios meses de espera y nadie sabe por qué; centros de salud donde no se ha explicado en qué consiste la autosustitución, por qué se ha puesto en marcha y cuál es su mecánica de funcionamiento; sábados «extra» que se asignan de forma obligatoria, sin que se haga un esfuerzo paralelo en orden a explicar las razones y (sobre todo) el método empleado para repartir estas cargas a partes iguales entre todos los médicos del centro; arbitrariedad y anarquía en la retribución de estas horas extras. La lista puede ser mucho más larga, pero su sentido no cambiaría un ápice.

Hay unos principios generales muy fáciles de entender, y lo demás es puro sentido común:

  1. Se deben sustituir, en principio, todas las ausencias de Medicina de Familia y de Pediatría de AP.
  2. La sustitución se hace con personal contratado en primer lugar, con amplihorario (voluntario) en segundo y con ampliagenda dentro del horario normal, y repartido entre todos, como última opción.
  3. Como regla general, la consulta de un médico ausente no debe cerrarse, y mucho menos si existiesen sustitutos disponibles o voluntarios para realizar amplihorario. Solamente se justifica el cierre cuando falten las condiciones anteriores y el número de médicos trabajando sea demasiado bajo para hacerse cargo de la ampliagenda.

Ya han pasado bastantes meses desde que esta «self-sustitución» está vigente. Las instrucciones para su funcionamiento han tenido tiempo sobrado para circular entre las Gerencias y los centros de trabajo, pero, al parecer, algunos centros de salud ignoran todavía el «abc» en lo referente a la sustitución interna en los centros de AP .. ¿o quizás habrá quien tenga interés en que este sistema no funcione?. A veces parece ésta la explicación de algunas cosas que están ocurriendo.